martes, 25 de diciembre de 2007

MOSOQ RUNA (2) NIÑOS JUGANDO AL TEATRO

¿Cómo es posible que dándose todo un cúmulo de circunstancias desfavorables unos niños peruanos se críen alegres, confiados en su futuro y plenos de vitalidad?
Son muchas las razones.
Una de ellas: El taller de teatro de Mosoq Runa

Yo no estaba pasando precisamente por el mejor momento de mi vida cuando mi amigo, el venezolano Pablo Brito Altamira me habló de un proyecto en Perú.
No recuerdo sus palabras literales. Quizás dijo :‘Verás es un hogar de niños en Perú y hacen teatro. ¿Por qué no vienes con tu cámaras y grabas un documental de todo el proceso de creación de la obra?'

La obra resultó ser Pigmalión de Bernard Shaw adaptada muy libremente por el siempre libre Pablo Brito Altamira.

Los mayores Fidel, Ernesto, Kantu, Edith, Rosa, Vilma y Edgar representaban el Pigmalión y los chiquitos Mónica, Yulissa, Karen, Jaime, Rodrigo, Percy, Deiner ,Ignacio y Mariela la pequeña pieza el Arca de Noé ,ambas dos dirigidas por la incasable Yenny Arque.

Actores todos ellos con mayúsculas .
Realmente para conseguir en España o Francia un elenco como ése habría que haber hecho un casting entre mil niños.

Les grabé casi treinta horas.
Ensayando, jugando al aire libre resguardados por las inmensas montañas andinas, estudiando, hablando de su vida delante de la cámara.

Eso sí, tras grabarlos se oía inevitablemente :‘Quiero verme’

Fidel, el mayor, quiere ser cocinero y era al que menos le gustaba el teatro, pero mostraba una absoluta disciplina y abnegación por superarse y no fallar a los otros. Me dijo que le provocaba inquietud salir de Mosoq Runa a los 18 años porque se sentiría...como un astronauta cuando saltara por primera vez al espacio.

Un poco travieso es Jaime, gemelo de Percy (hermano a su vez de Fidel, Vilma, Yuli, Rosa).Cuando lo grababa notaba que era el que más se distraía. Pero me sorprendió como retenía el texto de los mayores.
El último día hicimos un experimento: que los chiquitos hicieran la obra de los grandes, y... se la sabían de memoria,
‘Yo quiero hacer el papel de Kantu’
’No, yo’

El teatro como un juego, que te ayuda a memorizar, a hablar en público, a cohabitar en un espacio reducido con los otros...

De dominio escénico podría hablar y mucho Edgar. Podría hablar mucho si no fuera tan tímido. En los primeros días de mi estancia llegué a confundir a Edgar con su hermano menor Rodrigo. Porque Edgar que es un gigante de las tablas, en la vida cotidiana pasa desapercibido. Con la agilidad de un trapecista, su dominio temporal y espacial es propio de un actor que llevara tres décadas en los escenarios mutando cada vez que fijaba su máscara a su rostro.

El teatro no es la única razón del Milago de Mosoq Runa.

Me falta espacio en este blog. Por eso éste es sólo el segundo de los post de esta entrañable aventura.

No sé cuanto les pude ayudar yo a ellos, sé lo que ellos me ayudaron a mí.

Escribe Pablo Brito Altamira :(http://www.canasanta.com/teatro/mosoq-runa-teatro-000001.html)
‘Porque el Teatro, la más antigua de las artes colectivas, la primera exploración del inconciente y la forma poética que más se parece al juego ( y sin juego no hay arte) es el camino que estos niños están recorriendo para mover y conmover a un mundo en apariencia inmovilizado e inconmovible’.

Pues ni media palabra más