domingo, 15 de junio de 2008

LA ÚLTIMA VEZ QUE VI A JUAN DOMÍNGUEZ.MAQUILLADOR CON MAYÚSCULAS



La última vez que vi a Juan Domínguez estaba con su mujer Carmen esperando a alguien que se demoraba ,sentado en el escalón de un escaparate,en la Calle Hilera, detrás de El Corte Inglés, junto a una parada de autobús.

Yo estaba a punto de irme a Perú. Hace ahora un año.
Le dije que acababa de comprarme una camarita.
¿Y tú qué tal?,le pregunté
Me he matriculado en Derecho en la UNED, me respondió.

Me hizo gracia. Aquél tipo brillante, de escasamente cuarenta años. Uno de los mayores caracterizadores/maquilladores del cine español ,se había matriculado en Derecho en la Universidad a Distancia.
Yo le dije que tenía un títulito en esa materia y en dicha universidad en algún sitio de mi casa, que si lo quería se lo regalaba.
Una de las pocas cosas positivas que me ocurrieron en aquel tiempo de aprendiz de leguleyo fue conocer a Pablo Schargorodsky, entrañable amigo y reconvertido actor de Jess Franco, bajo el nombre de Paul Lapidus.
Se había matriculado Juan en Derecho a la espera que crearan la titulación en Prevención de Riesgos Laborales que le sirviera en su trabajo(en el otro trabajo, en el que le daba regularmente de comer y le ayudaba a pagar la hipoteca) en la Compañía Sevillana de Electricidad( Sevillana –Endesa).
Porque Juan, a pesar de haber trabajado en USA con Rick Baker, el mayor genio de la caracterización y el animatronic de Hollywood, se ganaba la vida en la compañía eléctrica.
Su última frustración fue no participar en el oscarizado equipo de maquillaje del Laberinto del Fauno,porque la empresa en la que trabajaba no le dio una excedencia .

-¿Cuántos Óscar tiene Rick Baker, Juan?
-Cinco o seis.

Amigo de Baker y de su esposa chilena Silvia, Juan tenía un enorme dominio de su oficio y también del resto de los oficios del cine.
Tipo listo, irónico y observador me comentó que después del atentado de las Torres Gemelas, eran más reticentes a contratar extranjeros en los extensos equipos de maquillajes de las grandes superproducciones.
Así que Juan Domínguez se dedicaba a ayudar a cualquier cortometrajista de Málaga que demandara su servicio.
Hago mías unas palabras del excelente cineasta Enrique García sobre Juan:"Y el maquillaje de El Juego de Pedro fue mi primera colaboración con el GRAN Juan Domínguez. Pablo Díaz me hablo de él, no como un maquillador, sino como EL MAQUILLADOR, así en mayúsculas".

Entre tanto luchaba por poner en marcha La Ciudad de los Muertos.Un homenaje a esos vivos que disfrutan viendo cosas de muertos en la pantalla.Con una nula acogida por parte de las Instituciones malagueñas y andaluzas demasiado interesadas en alfombras rojas y demás lindezas festivaleras,que tanta mordacidad provocaban en EL MAQUILLADOR.
Está claro que Juan personificaba la gran paradoja del cine periférico. Mucho talento desubicado geográficamente.
La conversación duró escasamente media hora.
Fue la última vez que vi a Juan Domínguez.

Cuando regresé de Perú , un amigo común(Ezequiel Montes) me dijo que estaba enfermo. Es posible que bastante enfermo.
Pregunté a terceros por la evolución de la enfermedad pero sin importunar a Juan.
Supe del merecido homenaje que le dieron en el Festival de Benalmádena.
Y un mal día me enteré de su muerte. Fue el pasado mes de abril.
Tenía 41 años, mucho talento y una generosidad sin límites.
Descanse en paz.

1 comentario:

Antonio Villanueva Martín dijo...

Para saber más sobre Juan Domínguez ,ésta es una de sus páginas:
http://personal1.iddeo.es/dmm/